A cargo de la Lic. Silvia Gauvry
Las investigaciones actuales en ciencias de la salud muestran la incidencia del
estrés y las emociones negativas en el desencadenamiento de síntomas
físicos, enfermedades psicosomáticas y los trastornos que no tienen
explicación médica definida. Son reconocidos los costos económicos en salud
pública para la evaluación de estos pacientes, como también los que se
dirigen a su terapéutica médica.
Por otra parte, las enfermedades médicas pueden evolucionar
desfavorablemente por el efecto del estrés y el trauma psicológico, a raíz de
su diagnóstico o por ser co-mórbidos.
La Psicoprofilaxis quirúrgica es una intervención psicoterapéutica que se
ocupa, dentro de un marco interdisciplinario, de preparar emocionalmente a
las personas para afrontar una intervención quirúrgica con la menor cantidad
de secuelas psicológicas y físicas posibles. Pacientes que reciben preparación
psicológica previa a la operación, reducen el uso de analgésicos en el
postoperatorio, disminuyen niveles de ansiedad, angustia y estrés a montos
tolerables, cicatrizan más rápidamente, se infectan menos y reducen el
tiempo de internación promedio.
La psicoterapia EMDR (Eye Movement Desensitization and Reprocessing) ha
sido validada científicamente en su efectividad para el tratamiento del
trauma psicológico en el Trastorno por Estrés Postraumático y es utilizada en
la actualidad para el tratamiento del trauma o perturbaciones emocionales
que originan o acompañan diversos trastornos mentales y físicos.
Es una herramienta útil y eficaz para el tratamiento psicológico de
enfermedades que comprometen la unidad cuerpo-mente.
EMDR puede ser empleada para la Psicoprofilaxis quirúrgica para procesar la
ansiedad anticipatoria y experiencias negativas o traumáticas que se disparan
a raíz de la futura cirugía y que desestabilizan emocionalmente. Ayuda a los
pacientes a afrontarla con mayor estabilidad emocional.